Hibisco

Hibisco

Hibiscus Sabdariffa es el nombre cientifico que recibe este hibisco de la familia de las malváceas, originario de África tropical, desde Egipto y Sudán hasta Senegal, aunque, debido a sus propiedades medicinales o a su sabor en infusión, se cultiva en otras regiones con climatología favorable, como el sudeste de Asia, y Centroamérica.

La flor de hibisco utilizada para preparar el té no es la flor ornamental vista en jardines y macetas. La variedad Sabdariffa es la más adecuada debido a sus bondadosas propiedades y agradable sabor rico en ácidos orgánicos y un leve gusto a frambuesas.

Si buscamos en internet, encontraremos que a la infusión de esta flor, se le atribuyen una gama de beneficios relacionados principalmente con nuestra salud cardiovascular y nuestro sistema digestivo. Entre las propiedades más estudiades se encuentran las siguientes:

  • Un aliado en la perdida de peso
    La infusión de esta flor tiene una notable acción como acelerador metabólico. Razón por la cual uno de los usos más populares del hibisco, se dirige a la pérdida de peso.
    En su composición, se concentran distintos flavonoides y ácidos orgánicos, así como también, sustancias antioxidantes y anti-inflamatorias, que estimulan la quema de grasa corporal, previenen la retención de líquidos, facilitan la digestión y regulan la función intestinal, contribuyendo a la pérdida de peso.
    Estas mismas sustancias le permiten a nuestro organismo deshacerse de las toxinas al mismo tiempo que se adelgaza.
    Son dos los principales flavonoides presentes en estás flores, relacionados con la perdida de peso y la reducción del colesterol: la quercetina, que proporciona la acción diurética, y la antocianina, que evita la acumulación de grasa. Estos mismos flavonoides también ayudan a aumentar el «colesterol bueno» (HDL) y a disminuir el «colesterol malo» (LDL).
  • Reducción del colestero
    Gracias a su ya mencionada combinación de antioxidantes y flavonoides, la infusión de hibisco a demostrado mejorar el perfíl lipídico de nuestro cuerpo, reduciendo los niveles de colesterol en nuestra sangre de modo que obtenemos importantes beneficios para nuestra salud cardiovascular, protegiendo nuestro corazón y vasos sanguineos, beneficiando distintos organos razón por la cual se le atribuyen innumerables benificios.
    Acá pueden encontrar un estudio realizado en un paciente con diabetes tipo II donde se comprueban las propiedades del hibisco sobre el perfil lípidico
  • Mejora la función y la salud del hígado
    Esto se debe a que los antioxidantes ayudarán a neutralizar los radicales libres presentes en las células y tejidos del cuerpo. De esta forma, además de proteger el hígado, será un gran aliado en el tratamiento de enfermedades relacionadas a este órgano.
  • Antiinflamatorio y antibacteriano
    Por ser rico en ácido ascórbico (la famosa vitamina C), el té de hibisco es un fuerte estimulante del sistema inmunológico de nuestro cuerpo. Por lo tanto, su consumo balanceado proporcionará un fortalecimiento general de la salud, garantizando las propiedades anti-inflamatorias y antibacterianas de esta flor, previniendo resfriados y gripes. 
  • Equilibrio hormonal y síntomas menstruales
    El té de hibisco también puede tener su uso y efecto en el alivio de síntomas y dolores menstruales. Por ayudar en la restauración del equilibrio hormonal, el hibisco aporta innumerables beneficios en la reducción de los síntomas menstruales y premenstruales. 
  • Antidepresivo natural
    Por poseer diversas vitaminas y minerales (como flavonoides), el té de hibisco es conocido como un antidepresivo natural en la medicina. Su consumo regulado ayudará eficazmente a reducir los síntomas de depresión y ansiedad, ayudando a relajar la mente y también el cuerpo, como han demostrado diversos estudios.
    Las antocianidinas del hibisco y su acción antidepresiva
  • Control de la presión arterial 
    Un informe publicado en 2009 por la American Heart Association muestra que el té de hibisco es un poderoso agente en la reducción de la presión arterial en adultos hipertensos. Esto significa que el consumo regular del té de hibisco es capaz de ayudar a aquellos que sufren de presión arterial elevada en forma constante, lo que comunmente denominamos como un cuadro hipertensivo. Al respecto existen diversos estudios.
    El hibisco y su efecto antihipertensivo
  • Ayuda en la digestión
    El té de hibisco aumenta la función intestinal y facilita la digestión, de modo que el organismo sea capaz de digerir y eliminar los alimentos rápidamente. Por lo tanto es un buen té adecuado para beber despues de las comidas. 

Infusión: Se prepara con los sépalos de la flor, los cuales se añaden al agua recién hervida, se deja reposar tapadito por 5 minutos antes deber, puede agregar canela o jengibre a gusto. Para obtener los mayores beneficios se aconseja beberla sin azúcar o en su defecto endulzada con miel. Se puede beber fría o caliente.